LAS EXCÉNTRICAS EN EL CRONÓGRAFO DE RUEDA DE PILARES.

Introducción.

En los mecanismos de cronógrafos y contadores; las excéntricas tienen muchísima importancia para un correcto funcionamiento del sistema; de ellas depende la función de regulación en los ajustes de los dientes del engranaje y de las ruedas específicas del mecanismo.

Para un cronógrafo de rueda de pilares de construcción estándar y de los fabricados a mediados del siglo XX; disponían de forma generalizada como mínimo de tres excéntricas, a saber:

  • Dos para el sistema de embrague.
  • Una para el puente y su rueda corredera.

Nota : en el dibujo que adjuntamos; podemos visualizarlas fácilmente en el mecanismo al señalizarlas con un círculo rojo con el número de referencia y si además seguimos la flecha negra que los acompaña, descubriremos su ubicación en el reloj.

Explicación.

Las dos excéntricas con los números 8400 y 8401, pertenecen al conjunto del embrague, formado por la platina de embrague, la rueda y el puente; este conjunto termina con un pico que se situá en la rueda de pilares.

Las dos excéntricas 8400 y 8401 regulan la penetración del dentado entre la rueda de arrastre (fijada en el eje de la rueda de segundos del reloj) y la rueda de embrague, así como también, entre la rueda de embrague y la rueda de segundos del cronógrafo o trotadora.

Observación: los perfiles de estas ruedas son triangulares para asegurar una traslación del movimiento uniforme a la aguja de segundos del cronógrafo (para que no den saltos muy exagerados)

Los círculos rojos muestran las excéntricas y las flechas su ubicación en el reloj.

La excéntrica 8406 pertenece al conjunto del puente de la corredera y su función consiste en ajustar la distancia, para que el dedo impulsor de la rueda de segundos del cronógrafo o trotadora, pueda hacer avanzar solo un diente de la corredera.

La rueda corredera también engrana con la rueda de minutos del cronógrafo y esta lleva ajustada a su eje, la aguja de los minutos del mecanismo.

Manipulación y control de funcionamiento.

Puede ocurrir que algún relojero no familiarizado con estos mecanismos, intente desatornillar las excéntricas como si fueran unos tornillos normales del reloj; en este caso al desajustar el sistema, el reloj se parara o el cronógrafo no funcionará.

Observación: antes de manipular debemos informarnos y aprender el como y el cuando hacerlo y en el caso de desajustar las excéntricas procurar disponer de elementos de control visual como lupas de gran aumento o binoculares para reajustar todo de nuevo.

Al girar un poco una excéntrica a derecha o izquierda los dientes del engranaje correspondiente se desplazaran hacia dentro o hacia fuera; si es hacia dentro podemos bloquear las ruedas y si fuese el caso contrario las ruedas darían saltos no deseados y en la peor de las situaciones, las ruedas se empuntan con el consiguiente paro del reloj.

Las excéntricas se manipulan con un destornillador en perfecto estado y si notamos mucha dureza o demasiada facilidad de giro, debemos solucionar este defecto antes que nada.

Los dientes de las ruedas de arrastre, embrague y la trotadora deben funcionar con una penetración entre ellas de unos ¾ de su longitud total para asegurar una trasmisión del movimiento uniforme a las agujas. Dicho de otra forma, entre los tres diámetros de las ruedas; el de base, el primitivo y el exterior, las puntas deben sobrepasar más del diámetro primitivo sin llegar al exterior.

En resumen; las excéntricas son las encargadas de mantener a una distancia correcta los engranajes del cronógrafo, cuando los usuarios manipulan los pulsadores y giran la rueda de pilares para poner en marcha el sistema; depende de ellas en gran medida que el reloj no se pare, o su funcionamiento sea correcto.

Observación final: el dibujo utilizado en el escrito, es solo a modo de ilustración didáctica para un mejor conocimiento del sistema; en otros calibres o referencias hay más de tres excéntricas; sobretodo en calibres sin rueda de pilares de los llamados a leva o cama.